El lado oscuro del trabajar desde la casa


 

Cada vez más empresas están ofreciendo diversas alternativas para que sus empleados se transformen en trabajadores desde la casa, y muchas ofrecen habilitar espacios de trabajo muy bien equipados en las casas de sus colaboradores. Sin embargo, trabajar en el hogar tiene un lado que a veces puede ser muy oscuro.

El trabajo remoto, y específicamente, el trabajo en casa ha mostrado, tanto para las empresas como para los empleados, beneficios significativos, siendo alguno de ellos el menor gasto en transporte, mayor flexibilidad y autonomía en sus trabajos, poder lidiar más efectivamente con las responsabilidades familiares y domésticas, menor ausentismo, mayor retención de las empresas con sus empleados, aumento de la productividad, y mejora en la atención al cliente y reducción de costos de oficina.

Sin embargo, al profundizar en la rutina diaria de este trabajador remoto, se hace evidente la dificultad para manejar los límites entre el trabajo y el hogar, convirtiéndose en un gran desafío poder integrar las necesidades de ambos mundos. Esto trae consigo problemas y tensiones, que pueden transformar la experiencia en algo negativo e incluso improductivo.  

¿Qué es lo que puede provocar que el trabajo desde el hogar falle?

Si bien los estudios señalan que el trabajo desde el hogar mejora la conciliación de trabajo y familia, se ha visto que este podría tener un efecto contrario: los trabajadores tienden a trabajar jornadas más largas, luchando por tener tiempo para su vida personal. En muchos casos, la idea de hacer trabajo doméstico durante las horas laborales se hace imposible y algunos empleados terminan trabajando largas jornadas de igual forma. Al mismo tiempo, las familias de estos trabajadores se generan las expectativas de que el padre o madre que se queda en la casa podrá dedicar tiempo a las labores domésticas y de cuidado de menores, lo que conlleva a peleas y estrés familiar.

También se ha visto que la mayoría de los trabajadores remotos tienen dificultad para desconectarse del trabajo. Éstos terminan trabajando más horas al día que en una oficina tradicional, extendiendo su jornada hasta altas horas de la noche, los días festivos e incluso los fines de semana. Chequear el último correo de la noche termina siendo un ritual muy común. Más aún, se ha evidenciado que estos trabajadores terminan trabajando aun cuando están enfermos, siendo que en situaciones de trabajo tradicional habrían pedido permiso o licencia médica.

stress work home

Ciertamente esto último beneficia al empleador, pero a un costo muy alto para el empleado, lo cual hace que muchos prefieran cambiarse de trabajo y volver a una oficina con una rutina de trabajo tradicional apenas tienen la oportunidad. La falta de límites (físicos, temporales o sociales) que hay entre el trabajo y el hogar, hace que el trabajo esté “siempre ahí”, omnipresente.

¿Qué hacer?

Existen estrategias que pueden ayudar a combatir estos riesgos al trabajar desde casa. Por ejemplo, hay trabajadores que señalan vestirse, arreglarse y seguir la misma rutina como si fuesen camino a la oficina. Tener planificaciones horarias claras y bien establecidas, y controlar la cantidad e intensidad de distractores internos y externos que abundan en el hogar, son solo algunas de ellas. Y, si bien funcionan, cuando pensamos en la presencia de lactantes e hijos pequeños, el panorama se complejiza aún más. No sólo por las demandas de los niños, para quienes por su tipo de pensamiento concreto se hace casi imposible transar con ellos, sino también porque muchos padres y madres quieren pasar tiempo de calidad en abundancia con sus hijos, prestar atención de manera constante y disfrutar de los primeros años de vida, escuchando rumiantemente en sus cabezas “dura tan poco esta etapa”. La crianza, la parentalidad, es inconcebible sin la emocionalidad y la vida sin deseo, y el trabajo, la productividad, muchas veces nos invitan a separarnos de esto, como si realmente se pudiera sin enfermar en el intento. 

En Mu’hu Cowork conocemos perfecto estas dificultades y por ello, creemos que las horas en que un padre y trabajador que tiene hijos en edad preescolar, deben ser provechosas y organizadas, para así disminuir la carga mental y tener reales momentos de conexión con los hijos, sin exceso de pendientes. Sabemos también que no basta solo con enfocarse en la eficiencia y eficacia, sino también en salir de la soledad, en contar con red de apoyo no solo para aspectos laborales, sino también para ese otro trabajo muchas veces invisibilizado: criar y cuidar.  Es por eso que hemos dedicado un espacio donde puedes organizar tu día, separar tu trabajo de tu hogar, dedicarle un tiempo adecuado a este, y estar cerca de tus niños, mientras ellos se divierten acompañados de alguien que también es apoyo para ti, no solo para tu hijo.

¡Te invitamos a conocernos y contar con nosotros junto a tus pequeños y así no pierdas las ventajas del trabajo remoto, evitando caer en el lado oscuro de trabajar en casa!